Estimados amigos y amigas:
Quizás no sea necesario hacerlo, pero siento una especie de obligación moral de ofrecer una disculpa a todos aquellos de ustedes que fueron a Bariloche y no obtuvieron la dosis de jazz que esperaban.
Sólo puedo dar como explicación que el concierto de anoche fue organizado con demasiada rapidez y que naturalmente quedaron algunos cabos sueltos.
Definitivamente no contábamos con la intransigencia del gerente del lugar, quien había ofrecido “NO COVER” a Pedro Sierra y acabó cobrando la entrada (aunque hubiera barra libre). Luego de que Armando, Gilberto y Paco tocaron un excelente set de media hora en donde mezclaron drum&bass con free jazz y ritmos groovies y funkeros, el gerente de Bariloche se negó a que los jazzistas regresaran al escenario e incluso llegó a proferir respuestas como: “ustedes no son mi público”. Por algo ya está muriendo ese lugar.
Mucho menos esperábamos el gusto musical del DJ de Bariloche, en cuya defensa sólo podemos decir que probablemente a él tampoco le guste la música que “tocó”. Nunca sería mi intención exponer a mis amigos a RBD, Maná o el reggaetón; claro que si bailaron y disfrutaron de aquello, hagan caso omiso de mis puristas lamentos.
Muchos de ustedes me preguntaron por Blair y su ausencia fue debido a que sus padres vinieron de visita desde Nueva Zelanda; Blair obviamente tuvo que cumplir con sus compromisos familiares-navideños, lo cual es algo muy comprensible.
Les pido que no permitan que esto les baje el ánimo y que sigan asistiendo a los eventos que organicemos. Les mantendré informados de cualquier concierto de jazz que programemos para la próxima semana, después de Navidad, y para principios de enero.
Un abrazo y prósperas fiestas,
Gerardo