Las mujeres más bellas de la política mexicana

A sugerencia del buen Patres, y aunque debo estar olvidando a otras merecedoras, estas son mis nominadas:



2) Margarita Zavala, primera dama de México. Me vale madres lo que piensen de mí por decirlo. Yunquera, mochísima y lo que sea (vean el texto de Tomás Mojarro sobre ella), me encanta esa vieja. Margarita es la fuerte, definitivamente. Y la neta, quienquiera que no sea Martita Sahagún es un absoluto alivio.











1) Y sí, la nominada por el buen Patres es también mi número uno. María de los Ángeles Fromow Rangel, ex fiscal especializada en delitos electorales, actual titular de vinculación y participación social de la Secretaría de Salud. Una auténtica belleza mexicana, ya quisiera yo haber tenido compañeras como ella en la carrera de derecho.

Nuevamente, aceptamos sugerencias.

Las mujeres más bellas de la política mundial

Mis nominadas:

3) Ségolène Royal, la nueva candidata del partido socialista a la presidencia de Francia, quien nos recuerda al famoso poema de Enrique González Rojo que hablaba de una mujer que "tenía las piernas más hermosas de todo el movimiento comunista mexicano". Si doña Ségolène gana, creo que será necesario que un servidor aprenda la lengua y visite Francia por primera vez.

2) María Consuelo Araújo Castro, ministra de relaciones exteriores de Colombia y ex ministra de cultura (guapa e interesante). Aunque no comparto para nada su ideología (la del presidente Uribe, cachorro de EEUU), miren nada más qué belleza, cómo posa como una modelo. Claro que estamos hablando de Colombia, en donde todas las mujeres son bellas (lo comprobé en persona el año pasado).

1) Pero la reina de todas las reinas de la belleza política a nivel mundial es la exquisita Yulia Timoshenko, ex primera ministro de Ucrania y quizás la única líder mundial que ha salido en la portada de Elle. Lo que hace tener vodka en los genes. Vean eso nada más; por ella me vuelvo ucraniano y me inscribo a un gulag sin pensarlo.

Aceptamos sugerencias.

"Angostas oraciones", un poema de Eduardo Casar

Se supone que el mar
es la gran cosa.
Se supone que sabe
casi todo.
Que sabe a sal.

Pero en aquel momento,
en aquella, la precisa rompiente,
sólo nos dimos cuenta
de lo que estábamos viviendo
ella y yo.

Ella y yo.

Nosotros fuimos ella y yo.

Fue una cuenta muy larga
y los dos la pagamos.
Esa roca y la franja,
esa precisa ola enconcavada,
blanca de tanto azul.
Ese radio de onda continuada
que se partió para
partirme a mí la madre de la roca.
Esa ola
que hizo temblarme a mí.
La ola esa de la que estuve hablando.
Hablando de la piedra que se le enmarañaba.

Su muy flexible roca.

Que los demás regalen
mejores opiniones. Yo digo lo que izamos,
porque ella y yo anudamos
columnas vertebrales,
decidimos acentos
y fuimos engranando
las voces que atraviesan.

(Y muy bonito y todo, pero en este paréntesis
no puede respirarse.
—¿No puedes respirarme?
—No puedo respirarte.
—Entonces nos ahogamos.
—Nos ahogamos.)

Ella y yo sí supimos
cómo fue el rompimiento.

Ahora voy a contarles:
entre otras razones fue cierto sol sonámbulo
y fue la insólita
porosidad que hicimos, que inventamos
abierta con nuestro movimiento,
la parte más extrema de este brazo
buscando nacimientos.

Nadie. Nunca más nadie que ella
podrá ocupar aquellos
movimientos.

Gracias a dos los dejamos callados.

No quisiera mover otros detalles.

Y le sugiero al mar que se retire.


-- por Eduardo Casar, publicado originalmente en la revista Casa del Tiempo de la UAM. La ilustración que lo acompaña es uno de los óleos de la serie de paisajes marinos del fantástico pintor alemán y tocayo mío Gerhard Richter.

Cartón sobre los mix tapes

Quizás algunos de los lectores más adolescentes de este blog no sepan lo que es un "mix tape". Rápidamente podremos definirlo como una compilación de rolas puestas por un audiófilo en un cassette (artefacto portátil que permitía la reproducción auditiva utilizando cinta magnética, anterior a los mp3 y al Ipod), que normalmente entregaba el compilador a un amigo suyo aficionado a la misma música o a una chica guapa a la que quisiera ligarse. Mi historia con las compilaciones empezó desde la infancia con los cassettes que me hacía mi tía Marilú (algunos muy épicos: Chamín Correa con Víctor Yturbe "El Pirulí" ―que es, y será siempre, una real daga―, las Pandora cantando a Juan Gabriel ―del cual, la verdad, no me avergüenzo―, el Bachata Rosa de Juan Luis Guerra y los 4:40 ―que aún adoro―, pero agarró una fuerza especial cuando conocí a la banda rockera a finales de la secundaria (Felipe Atómiko, el tan olvidado Panqué, Christian Yépez), y a la metalera a inicios de la preparatoria (Luis y Javier Gamboa, Enrique, Anwar, etc.). Mario Helguera me hizo también unos mix tapes bastante chingones al inicio de mis exploraciones del jazz hace unos seis años, con música de Tete Montoliú, Anita O'Day, Clifford Brown, ¡e incluso Guadalupe Trigo!

Entonces, con ningún otro objetivo más que el de educar a las futuras (en algunos casos presentes) generaciones de clavados musicales, les dejo con esta explicación gráfica en dos partes sobre la importancia de los mix tapes, sobre la cual leí por primera vez en Bagatellen y que es de la autoría de un tal Jonathan Hill:

Y en una de las coincidencias curiosas de la vida, hace como un mes que no leía Caballo Negro, y hoy que lo hago me encuentro con una serie de tiras con el mismo tema (los mix tapes).

Ya viene

Así es, señores. 3 de febrero, sábado. Pronto avisaré en dónde será la fiesta.

27 años.

Cabrón, 27 años.

El domingo mi tía Meysi, la cubana (esposa de mi tío Hidalgo), hizo que me cayera el veinte. "¿Cuántos años vas a cumplir, Gerardo?". "27", dije. "¿27? Pensé que eran 24, si acaso 25".

No. No son 24, ni 25.

Son 27.

Igor Solís expone en Nueva York

Esta es una pieza de mi carnal Igor Solís quien, además de ser hijo del estimado Pepe Solís, es indirectamente culpable de que ahora hayan conciertos de free jazz en Mérida, ya que fue la primera persona de nuestra generación (que yo recuerde) que empezó a escuchar a John Zorn. Paralelamente, nosotros (Enrique y yo) ya escuchábamos a Mr. Bungle y a Painkiller, pero faltaba la conexión con el elemento del jazz. El primer disco de jazz en el que me clavé en mi vida, Live at Birdland de Coltrane, fue una copia en CD-R de un disco original de Igor. Así de sencillo.

Igor expone en el Pratt Institute de Brooklyn a principios de febrero.














"Desvanece" (2006)

Naranjo sobre el alza del precio de la tortilla

Cortesía de nuestro estimado Rictronic.

Tony sobre la Payán

Colaboración de nuestra estimada Laura.

Un mensaje de Felipe Calderón

No comparto al 100% los reclamos de esta imagen aportada por el buen Lepo (por ejemplo, aunque reconozco no saber mucho del tema, según lo que he leído últimamente el maíz transgénico no es el diablo que describen los globalifóbicos), pero la verdad me dio tanta risa que decidí publicarla aquí. Y sí, Calderón es un piojo, que nadie nos engañe.

Ojalá estuviera por aquí el buen Pável para platicar de las ridiculeces de la Payán, el PAN y el PRD estatal. Hay que hablar de éstas con alguien que no tenga la más mínima compasión para reírse de todo.

RIP Alice Coltrane y Michael Brecker

Alice Coltrane

























Michael Brecker

Now Playing

Quizás el disco más hermoso de Alice, "Journey in Satchidananda".

Video del Cuarteto Mexicano de Brian Allen en Unas Letras, viernes 5 de enero de 2007

Brian Allen: trombón y efectos
Armando Martín: guitarra eléctrica y efectos
Arturo Báez "El Bebé": contrabajo, bajo eléctrico y efectos
Hernán Hecht: batería y percusiones

Nota de La Jornada sobre los conciertos del Cuarteto Mexicano de Brian Allen

Brian Allen Mexican Project

"ESTE 2007, QUE A DECIR de los numerólogos es nueve y es cero, empieza jazzificándose a plenitud desde su primera semana de vida. Esto, gracias a los dos conciertos que ofrecerá el trombonista texano Brian Allen en la ciudad de Mérida; el viernes 5 de enero en Unas Letras (calle 56 # 465) y el sábado 6 en un nuevo foro llamado El Cervantino (calle 47 # 520).

RESULTA QUE EL AÑO pasado Allen ganó una beca del programa Conexiones Globales, de la Fundación Meet The Composer, presentando el proyecto Brian Allen Mexican Project, consistente en desarrollar una serie de composiciones alrededor del free y el avantgarde y presentarlas en Yucatán, acompañado por tres músicos mexicanos: el guitarrista yucateco Armando Martín, el contrabajista michoacano Arturo Báez "El Bebé" y el baterista argentino-chilango Hernán Hecht.

ADEMAS DE SU instrumento base, cada uno de los integrantes de este combo manipulará una serie de efectos para complementar y armar sus respectivas improvisaciones alrededor del jazz, la música contemporánea, la música electrónica (no hay redundancias) y todo aquello que la expresividad de la vanguardia pueda traer escondido en la frente.

BRIAN ALLEN HA tocado y afianzado sus pasos con una infinidad de verdaderos íconos del free y el jazz contemporáneo; baste mencionar los nombres de Anthony Braxton, Ellery Eskelin, Joe Lovano y Kenny Werner para darnos una leve idea de los terrenos donde ha ido arando este cuate; aunque también se ha presentado y grabado a trombón solo. Actualmente, es profesor de Improvisación de Jazz, Desarrollo Auditivo y Estudio de Metales en el Brazosport College de Texas.

ARMANDO MARTÍN ES probablemente el mejor guitarrista yucateco de jazz. Estudió en el Centro Estatal de Bellas Artes y en la Escuela de Música Coral de Yucatán. En el 2000 viene al DF para estudiar la licenciatura en jazz en la Escuela Superior de Música del INBA. De regreso a Mérida se concentra en la composición y forma el Trío Oriente.

ARTURO BÁEZ NACIÓ EN Lázaro Cárdenas, Michoacán, y desde los catorce años tocaba música regional en el bajo eléctrico. A los 19 viaja al DF para estudiar bajo y armonía en la escuela G. Martell; posteriormente ingresa a la Superior de Música y se especializa en contrabajo, rematando poco después de manera particular con dos de los mejores maestros de estas tierras: Agustín Bernal y Aarón Cruz. Actualmente forma parte de la Big Band Jazz de México, del Cuarteto de Remi Álvarez y del grupo Los Tlayudos.

HERNÁN HECHT ES DE SOBRA conocido por estas tierras y estas columnas. Pero para quien ande medio norteado, diremos que es uno de los mejores músicos que han llegado de extranjia para quedarse en nuestro país. Nació hace 31 años en Buenos Aires y uno de los mejores vientos que han llegado del sur lo dejó con todo y batería en la Ciudad de México. Poca gente ha trabajado tanto por nuestro jazz, y todavía menos la que ha logrado hacerlo con tanta sensibilidad, emoción y talento. Argentino de excepción en más de tres sentidos.

NO PODEMOS TERMINAR sin decir que los conciertos en la Ciudad Blanca no hubieran sido posibles sin la intervención, organización y necedad de Gerardo Alejos, promotor, productor y jazzófilo que está dando los últimos toques a la organización del Primer Festival de Free Jazz Mexicano, a celebrarse en unos meses en su natal Mérida. Salud."

por: Antonio Malacara
amalacara(arroba)prodigy.net.mx

-- Publicado originalmente en La Jornada el 5 de enero de este año.

Brian Allen Mexican Quartet :: 5 y 6 de Enero en Mérida

¡No falten!

Magú sobre el año nuevo

Publicado en La Jornada de hoy: